Desde que tengo uso de razón siempre había escapado al estado de ese estado: "en pareja". Nunca, en verdad, lo había pensado como una posibilidad real a largo plazo. Es más, si me hubieran preguntado hace unos meses, ya se imaginarán lo que les hubiera contestado. Pero siempre pasa algo que de pronto te cambia la vida. Hace unas semanas me casé y este sábado me confirmaron que lo que nada en la barriga de Mayra es un niño (medio ladilla) que desde luego llevará el nombre de Ricardo (el 3º) ¡Noticia tremenda! ¿no creen?
Así las cosas. Y no saben cómo ha cambiado mi vida en estos días. Lo mejor de todo es que me siento feliz. Creo que nunca lo había dicho, pero la neta me siento de lujo.
Venga la nueva vida. Venga el futuro.
1 comentario:
Muchas felicidades, por el casorio y por el niño, y que decir, que siga la vida, no?, jeje
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