22 mayo 2011

La invasión de las Canas Rabiosas

Hoy no hay crónica que pueda superar mi sopresa. Sí, hoy fuí a la peluquería y observé detenidamente un ejército de canas en mi cabeza. ¡Apenas llevo dos meses como papá y ya estoy sufriendo las consecuencias! Aunque ustedes no lo crean el viernes sólo tenía unas cuantas, las de siempre, pero bastó una plática apocalíptica con mi amigo Tirso Castañeda para que se desbordaran. Entre que soy papá y los anuncios del fin de mundo (y una que otra cosa más) me están llenando de cabello blanco. Ni hablar, habrá que resignarse. Ahora tendré que dormir más, dejar de fumar (ahora sí), ¡No, las chelas no!, pero algo dentro de mí dice: ¡Sí, ni modo, ya te tomaste todo lo que te tocaba! Veamos qué pasa, por lo mientras hoy no salí en toda la tarde. Ser un nuevo viejo no es nada fácil.

No hay comentarios: