09 enero 2009

Héctor Aguilar Camín reformula Nexos


Cuando Héctor Aguilar Camín asumió por vez primera la dirección de Nexos, en 1983, se vivía un tiempo de crisis económica en México; al dejarla, en 1995, comenzaba otra etapa de dificultades. Regresa a dirigir la publicación en un año complicado para el país y para el resto del mundo.
Quizá por ello plantea que el reto más importante que habrá de enfrentar en este nuevo periodo al frente de la publicación será el garantizar su supervivencia, mediante tres soportes básicos: el apoyo publicitario, la atracción de un mayor número lectores y una agresiva política de suscripciones.
La revista tiene un tiro cercano a los 17 mil 500 ejemplares y vende entre 14 y 15 mil, de los cuales la mitad son suscripciones, donde hay una opción interesante para su crecimiento.
Para lograrlo ofrece una columna vertebral sustentada en las secciones Expedientes, dedicada a los trabajos periodísticos; Narrativas, para la ficción literaria y un espacio reservado para el ensayo.
“Queremos una revista en la que haya más personas, más situaciones, más historias, y menos conceptos, análisis, procesos y tendencias. Queremos un equilibrio entre el análisis y la narración.”
Se trata de ofrecer alternativas en un tiempo en que la prensa escrita abandonó géneros periodísticos como el reportaje y la crónica, “los periódicos han cometido el error de tratar de competir con la rapidez de la radio y con la televisión”, a decir de Aguilar Camín, quien regresa a Nexos con un nuevo equipo, teniendo a Héctor de Mauleón como subdirector.
“Eso es una desgracia nacional. Veamos nuestros periódicos y veremos que están llenos de notas breves, casi atenidas a una declaración, a un incidente, a una cifra y los periódicos creo que cometen el gigantesco error de no poner a sus reporteros a escribir largo, a contar las cosas y darles espacio para que fabriquen reportajes con el rigor suficiente y con el toque del reportero, que es un escritor.”
En Nexos habrá la oportunidad de abrirse a diversos registros periodísticos, a trabajar los textos con mucho más detalle, “tallerearlos —como dice De Mauleón—: hablar con el autor y mejorar el texto, de manera que pudiéramos tener en la revista un énfasis más fuerte en el ámbito periodístico”.
Lo más importante, sin embargo, será ofrecer textos legibles antes que largos: una revista que refleje la realidad; plural en su relación con los distintos actores de la vida política, económica y social del país.
“Nuestro trabajo es estar seguros de que ofrecemos como lectura algo que a nosotros nos parece que vale la pena, que su extensión no es gratuita […], donde se atrape al lector: queremos ofrecer la mejor posibilidad de lectura.”
Otro de los cambios de la publicación es que abre su página electrónica a la consulta de todos los contenidos, ya consultable aunque todavía se encuentra en la etapa de rediseño, con la intención de atrapar el interés de jóvenes lectores. México. Jesús Alejo
(Tomada del Milenio)

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